La sucesora de «el juego del calamar» de Netflix, sigue a los concursantes de un reality show que se vuelve algo complicado. ¿Cómo termina The 8 show? ¿Es posible un final feliz para los concursantes de este brutal kdrama?
Es imposible no comparar The 8 Show con el juego del calamar, ambos disponibles en Netflix.
Ambos son violentos K-dramas de Netflix:
- Están centrados en realitiy shows de superviviencia en los que
- los concursantes son un grupo de personas en situación desesperada,
- que son llevados a sus límites físicos y mentales.
Y a pesar de la brutalidad, son series excelentes. Eso sí, no aptas para personas sensibles.
Contenido
¿Cuáles son las reglas de «El show de los 8»?
Al principio de la serie, conocemos al narrador (Ryu Jun-yeol), un hombre corriente que ha decidido terminar con su vida tras acumular una deuda de 900 millones de wones, y ser perseguido por usureros.
Cuando está a punto de saltar de un puente, recibe una transferencia de dinero y le recoge una limusina. Le acompañan a un extraño teatro donde le ofrecen la oportunidad de ganar una fortuna o coger un par de cientos de dólares e irse a casa. A pesar de lo extraño de la situación, decide quedarse.
El hombre entra en un patio cerrado decorado como un patio de recreo abandonado y a partir de ahí, lo conoceremos como 3er Piso, debido al apartamento que elige, en la tercera planta de ocho.
A él y a los otros siete participantes (los pisos 1-8) sólo se les da un uniforme a cada uno. Tendrán que comprar artículos de primera necesidad o muebles (incluido un retrete improvisado) con el dinero que ganen, y todo lo que consigan les costará 1.000 veces más de lo que les costaría en el mundo exterior.
- No pueden pedir comida ni bebida,
- reciben 12 kits de comida y botellas de agua al día.
- También hay una cuenta atrás en el patio que marca el tiempo que falta para que termine el espectáculo.
- Pueden aprovechar el tiempo para comprar cualquier cosa que necesiten fuera de sus habitaciones.
- Para ganar más tiempo, tendrán que mantener el interés del público anónimo que les observa a través de las cámaras de seguridad.
Cada minuto que mantengan el espectáculo, ganarán dinero para llevárselo cuando se marchen. El espectáculo termina cuando se acaba el tiempo o cuando alguien muera.
Hasta aquí, podría parecer sencillo, pero no todos los concursantes ganan lo mismo: la tarifa viene determinada por la planta que hayan elegido al llegar, y también se corresponde con el tamaño de su habitación.
El piso 1 (Bae Sung-woo), es un artista de circo que tiene problemas para andar, vive en una habitación semisótano y gana 10.000 wones (unos 7 dólares) por minuto, mientras que el piso 8 (Chun Woo-hee), vive en un ático y gana 340.000 wons por minuto (unos 350 dólares).
Pronto empezarán los conflictos por el dinero y esto sumado a la crueldad y la inclinación a la violencia de algunos concursantes de las plantas altas (clases altas) harán que las cosas se pongan feas.
A lo largo de los episodios, el grupo se divide de forma natural en dos bandos: los pisos inferiores (1, 2 y 3) frente a los pisos superiores (6, 8 y la minion del piso 4), con el 5 y el 7 como comodines.
Los pisos superiores gobiernan con crueldad, y finalmente el 8 se convierte en una dictadora despiadada que mantiene el espectáculo y consigue horas de programa, torturando a los pisos inferiores.
¿Cómo termina The 8 show? Final explicado
En el episodio 8, los pisos inferiores escapan finalmente de las tortura del piso 8 con la ayuda de los pisos 4 y 5.
Con los pisos 8 y 6 atados y bajo control, el resto de los participantes en el programa deciden llevar a cabo el plan de 1er piso para cambiar habitación y enviar a los malvados a la clase más baja de la sociedad, y así además, ganar más dinero y controlar el programa.
Así descubrimos que el firme objetivo de Primer piso, de ganar 1.000 millones de wons era el precio para poder cambiar de habitación.
Una vez hecha la compra para el cambio de habitación, sufren otro giro del destino: los 1.000 millones de wones no eran para cambiar de habitación, si no que sólo pagan las instrucciones para cambiar de habitación.
Para poder reclamar la 8ª planta, necesitaría pagar 34.000 millones de wons
Pérdida la última oportunidad de subir de status dentro del sistema, el resto de pisos acuerdan finalizar el programa y agotar el tiempo, y le donarán entre todos dinero a 1er piso.
Sin embargo, 1er piso completamente desesperado y habiendo perdido la cordura, amenaza a todo el mundo y les ata. Monta una actuación de circo, y para conseguir el máximo de tiempo posible, camina por una cuerda floja.
Comienza a saltar por la cuerda, y en medio de una alucinación se imagina que es libre y está saltando por todo Seúl. Alcanza el punto más alto de la sala y se agarra al proyector que hace las veces de sol artificial del plató.
El proyector se desprende del techo y provoca un incendio al caer al suelo, sobre el que cae 1er piso.
Los demás participantes se liberan de sus ataduras para ayudarle, piden cambiar todo el tiempo y dinero por ayuda médica para salvar a 1er piso, pero no responde nadie. No solo no acaba el tiempo, si no que ganan 200 horas más.
2º y 3er piso golpean la puerta, gritan por el interfono, pero las horas no dejan de aumentar. Así que la regla de que el programa terminaría si alguien muere, resulta ser falsa.
Furioso, 3er piso rompe todas las cámaras del recinto (mientras tanto, 8º piso grita que no quiere irse).
Por fin, una vez rotas todas las cámaras, se para el tiempo y 1ª planta dice sus últimas palabras, rompiéndonos el corazón y más sabiendo que quería el dinero para cuidar de su hija con una enfermedad rara: «Quería llegar más alto. He pasado toda mi vida en lo más bajo. Un don nadie como yo no debería haber sido codicioso. Lo siento mucho».
¿Qué le pasa a los concursantes del show de los 8?
3er piso es el primer participante en abandonar el patio, saliendo por el mismo teatro por el que entró al concurso. Entre aplausos enlatados, encuentra un sobre con un mensaje sencillo: «Enhorabuena. El dinero del premio se transferirá a su cuenta bancaria«.
Traumatizado, 3er piso vuelve al mundo tras dos meses y medio encerrado. Nada ha cambiado, a pesar de la desaparición de ocho personas, y nadie creerá lo que ha pasado.
Su cuerpo y su mente están destrozados por las torturas y la privación de sueño, así que se pasa el día durmiendo, intentando suicidarse al menos una vez y preguntándose si todo el tormento de la serie ha ocurrido realmente. Pero sabe que sí, porque es la única explicación para los más de 1.500 millones de wones en su cuenta.
Finalmente, 3er piso se recupera y gasta su dinero para montar un funeral para 1er piso.
Con la ayuda de varias vallas publicitarias repartidas por Seúl, localiza a algunos de los concursantes.
A lo largo del capítulo, descubrimos que 2º piso (Lee joo-young, que acompañó a Park Seo-joon en itaewon class) era una trabajadora de la construcción que se endeudó avalando los gastos médicos de compañero de trabajo lesionado),
4º piso, trabajaba como aparcacoches y era menospreciada por sus compañeras de estudios más ricos.
5º piso era la mujer de un médico que fue estafada por un amante
La 6ª planta era jugador de béisbol hasta que le echaron del equipo por apostar de forma ilegar (aunque no se presenta al funeral, envía una corona de flores)
Los que no se presentan son 7º (que donó todo su dinero a la familia de 1er piso) y 8º piso, detenida y multada tras destruir una galería de arte con una excavadora.
Después del funeral, el grupo de cuatro sale de la sala y no se vuelve a ver.
Escena post créditos del final de The 8 show
A mitad de los créditos, descubrimos un poco más de 7º piso: había sido un guionista fracasado antes de la serie y, tras el programa, ha convertido la horrible experiencia en un guión que presenta a un ejecutivo.
Por supuesto, al ejecutivo le encanta, y comenta que el proyecto «incluso podría dar lugar a una secuela» (a día de hoy no se sabe si habrá segunda temporada de la serie).
También hay un giro divertido: después de que 7th Floor comente que los espectadores no querrían que la vida de los pisos de arriba acabara bien, el ejecutivo se inclina y dice: «Pero estamos viviendo vidas geniales, ¿no?».
Y añade: «¿Cómo crees si no que tengo tanto dinero?», pero justo cuando 7th Floor empieza a mostrarse sorprendido, el ejecutivo se ríe y dice que sólo está bromeando en inglés.
Aún así, la breve escena juega con la misma cuestión que planteó El juego del Calamar: ¿Podría algo así ocurrir en la vida real? ¿Que gene rica use a gente en la miseria para divertirse?
La serie plantea muchas dudas sobre la naturaleza humana: ¿en qué se convierten los seres humanos cuando están más desesperados y más empobrecidos? ¿En qué son capaces de convertirse las personas cuando se las lleva al límite? Como demuestra The 8 Show, es una pregunta que probablemente no queramos responder, al menos fuera de la ficción.
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